San Juan del Río, 28 Feb 10.- El juez cívico Fernando Pérez Hurtado, que estuvo el día en que un detenido murió en las galeras de la cárcel municipal y que luego, fuera denunciado por haber grafiteado las pompas a un menor infractor, habría sido destituido de su cargo, aseguraron fuentes de la propia administración.
El juzgado cívico municipal, que se encarga de sancionar las faltas administrativas de las personas que llegan a ser detenidas por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM), depende directamente de la Secretaría de Gobierno, organismo también responsable de la cárcel municipal.
De acuerdo a información proporcionada a rotativo, hace algunos días un menor de edad fue detenido por elementos policíacos, presuntamente al ser sorprendido cuando grafiteaba una barda, por lo que primero fue remitido ante el juzgado cívico, en tanto daban aviso a sus familiares.
Sin embargo, el entonces funcionario Fernando Pérez Hurtado, aprovechó para reprender al menor, que presuntamente fue obligado a que se bajara los pantalones para grafitearlo, como una forma de sancionar su falta administrativa.
Esta situación habría llegado a oídos del propio alcalde, que de inmediato ordenó que el funcionario en cuestión fuera destituido de sus cargo de manera tajante, amen de que se le pudieran aplicar las sanciones correspondientes, sobre todo por violación a los derechos humanos del menor.
Esta información, aunque no se ha confirmado de manera oficial, fue obtenida mediante personal de seguridad y de la propia alcaldía, al referir que la orden de destitución habría sido inminente.
El juzgado cívico municipal, que se encarga de sancionar las faltas administrativas de las personas que llegan a ser detenidas por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM), depende directamente de la Secretaría de Gobierno, organismo también responsable de la cárcel municipal.
De acuerdo a información proporcionada a rotativo, hace algunos días un menor de edad fue detenido por elementos policíacos, presuntamente al ser sorprendido cuando grafiteaba una barda, por lo que primero fue remitido ante el juzgado cívico, en tanto daban aviso a sus familiares.
Sin embargo, el entonces funcionario Fernando Pérez Hurtado, aprovechó para reprender al menor, que presuntamente fue obligado a que se bajara los pantalones para grafitearlo, como una forma de sancionar su falta administrativa.
Esta situación habría llegado a oídos del propio alcalde, que de inmediato ordenó que el funcionario en cuestión fuera destituido de sus cargo de manera tajante, amen de que se le pudieran aplicar las sanciones correspondientes, sobre todo por violación a los derechos humanos del menor.
Esta información, aunque no se ha confirmado de manera oficial, fue obtenida mediante personal de seguridad y de la propia alcaldía, al referir que la orden de destitución habría sido inminente.
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Y luego se llenan la boca hablando de "Estado de Derecho"
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