
La marcha, organizada como cada año durante la "Diada", el Día de Cataluña, congregó a unas 9.000 personas en el centro de Barcelona, según los medios, que citaron a la Guardia Urbana.
Al final de la manifestación, varios encapuchados subidos a un estrado quemaron una fotografía del rey Juan Carlos I con el uniforme militar y una bandera de España, precisaron.
En la marcha por la independencia celebrada durante la "Diada" de hace dos años, también fue quemada una fotografía del Rey.
Los catalanes están llamados a las urnas el 28 de noviembre en unas elecciones al parlamento y gobierno catalanes.
Estos comicios tienen lugar en un momento difícil para los socialistas del presidente regional, José Montilla, y después de que el Tribunal Constitucional español rechazara en junio una parte del estatuto de autonomía por considerar entre otras cosas que Cataluña no es una "nación".
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